Ayer finalicé el visionado de las respectivas segundas temporadas de las dos series que más me han enganchado últimamente: Lost y Desperate housewives (Perdidos y Mujeres desesperadas, respectivamente, aunque como las he visto en V.O. prefiero utilizar su nombre original).
Reconozco que a Lost me he enganchado recientemente y sólo gracias a que mis tíos me regalaron la primera temporada en DVD estas navidades pasadas. Hace apenas dos meses me pegué un empacho viéndola en la soledad de mi hogar y me enganché de tal modo que empecé a obtener los capítulos de la segunda temporada en cuanto tuve ocasión, como he hecho con Desperate Housewives desde hace bastante tiempo. Así pues, he visto la segunda temporada casi como si fuera una megapelícula, y no he tenido que esperar a ver el siguiente capítulo salvo los dos o tres últimos.
Si bien al principio esta serie carecía de guión en mi opinión, con insufribles y constantes flashbacks de los protagonistas (que no son pocos), después ha resultado que ese conocimiento de cada uno de los personajes ha ayudado mucho a entender sus reacciones en la trama principal que ¡oh, por fin! ha aparecido en esta segunda temporada. Y por supuesto, al conocerlos mejor tienes mayor empatía con ellos y sus dramas. El fin de esta segunda temporada ha sido apoteósico, y ha conseguido que me coma todas las uñas, de pies y manos, pensando en que tengo que esperar todo el verano para saber cómo continúa. Soy desde hoy un auténtico Lost-Addicted. Es una lástima que esta segunda temporada ni siquiera haya empezado a emitirse en TVE aún. La política de esta gente es lamentable: compran los derechos de series que pueden convertirse en seria competencia para ellos y las hunden con horarios imposibles, como ya hicieran antaño con la magnífica Urgencias.
Ojala pudiera decir lo mismo acerca de la calidad de esta segunda temporada de Desperate housewives. Ha bajado bastante el listón respecto a la primera, pero no por falta de calidad, sino por el cachondeo que se han traído los guionistas con las sub-tramas. Y se nota que a Marc Cherry, responsable principal de la serie y auténtico genio de este artífice no se ha currado el guión de todos los capítulos... así pues, tan solo la trama de los nuevos vecinos, los Applewhite, así como la de la impresionante Bree Van DeKamp, han conseguido sacar a flote esta temporada. Pese a todo, sigo teniendo especial cariño a la todoterreno Lynette Scavo, interpretada por mi amada Felicity Huffman, aunque se haya visto relegada a tramas tontas y secundarias salvo en los dos últimos capítulos.
Porque sí, los dos últimos capítulos de la temporada han sido de lejos los mejores. Cherry ha vuelto a la carga y nos ha regalado los momentos más antológicos de la serie a base de flashbacks y la preparación de nuevas tramas más que interesantes para la próxima temporada (inquietante el personaje nuevo de Kyle McLachlan). ¡Esperemos que esto siga por esta vertiente!. Ah, y como apunte personal... ¡qué atractivo está el personaje de Carlos Solís en el flashback con barba completa en lugar de la perilla que suele llevar normalmente!.
Supongo que este verano me dedicaré a ver películas o intentar echarle un ojo a la serie de la que todo el mundo habla: House. Seguiremos informando, hasta que pueda volver a ver a mi Jack Shepard o a mi Lynette Scavo.
Un abrazo.
Reconozco que a Lost me he enganchado recientemente y sólo gracias a que mis tíos me regalaron la primera temporada en DVD estas navidades pasadas. Hace apenas dos meses me pegué un empacho viéndola en la soledad de mi hogar y me enganché de tal modo que empecé a obtener los capítulos de la segunda temporada en cuanto tuve ocasión, como he hecho con Desperate Housewives desde hace bastante tiempo. Así pues, he visto la segunda temporada casi como si fuera una megapelícula, y no he tenido que esperar a ver el siguiente capítulo salvo los dos o tres últimos.
Si bien al principio esta serie carecía de guión en mi opinión, con insufribles y constantes flashbacks de los protagonistas (que no son pocos), después ha resultado que ese conocimiento de cada uno de los personajes ha ayudado mucho a entender sus reacciones en la trama principal que ¡oh, por fin! ha aparecido en esta segunda temporada. Y por supuesto, al conocerlos mejor tienes mayor empatía con ellos y sus dramas. El fin de esta segunda temporada ha sido apoteósico, y ha conseguido que me coma todas las uñas, de pies y manos, pensando en que tengo que esperar todo el verano para saber cómo continúa. Soy desde hoy un auténtico Lost-Addicted. Es una lástima que esta segunda temporada ni siquiera haya empezado a emitirse en TVE aún. La política de esta gente es lamentable: compran los derechos de series que pueden convertirse en seria competencia para ellos y las hunden con horarios imposibles, como ya hicieran antaño con la magnífica Urgencias.
Ojala pudiera decir lo mismo acerca de la calidad de esta segunda temporada de Desperate housewives. Ha bajado bastante el listón respecto a la primera, pero no por falta de calidad, sino por el cachondeo que se han traído los guionistas con las sub-tramas. Y se nota que a Marc Cherry, responsable principal de la serie y auténtico genio de este artífice no se ha currado el guión de todos los capítulos... así pues, tan solo la trama de los nuevos vecinos, los Applewhite, así como la de la impresionante Bree Van DeKamp, han conseguido sacar a flote esta temporada. Pese a todo, sigo teniendo especial cariño a la todoterreno Lynette Scavo, interpretada por mi amada Felicity Huffman, aunque se haya visto relegada a tramas tontas y secundarias salvo en los dos últimos capítulos.
Porque sí, los dos últimos capítulos de la temporada han sido de lejos los mejores. Cherry ha vuelto a la carga y nos ha regalado los momentos más antológicos de la serie a base de flashbacks y la preparación de nuevas tramas más que interesantes para la próxima temporada (inquietante el personaje nuevo de Kyle McLachlan). ¡Esperemos que esto siga por esta vertiente!. Ah, y como apunte personal... ¡qué atractivo está el personaje de Carlos Solís en el flashback con barba completa en lugar de la perilla que suele llevar normalmente!.
Supongo que este verano me dedicaré a ver películas o intentar echarle un ojo a la serie de la que todo el mundo habla: House. Seguiremos informando, hasta que pueda volver a ver a mi Jack Shepard o a mi Lynette Scavo.
Un abrazo.
1 comentario:
¿Cuándo montaremos nuestro club de fans de Felicity Huffman? :D
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