1 de abril de 2008

...y se fue.

Más de cuatro años juntos. Cuatro años, día a día hablando, compartiendo prácticamente todo, y ayer te fuiste. Encontraste un sitio mejor en el que trabajar.

Me siento feliz por ti, muchísimo, pero has sido el mejor compañero de trabajo que he tenido nunca, y siempre lo proclamaré con orgullo. Ayer lloraste y yo, como siempre y por cosas mucho menores, también. Pero ayer tenía un motivo más que lícito para hacerlo.

Estoy triste y afligido por tu marcha, pero también contento porque sé que es bueno para ti. Estas cosas pasan, y es así y punto. Pero pienso en todo lo que hemos pasado juntos y me emociono, es algo inevitable. ¿Qué hubiera hecho yo sin ti en ciertas fechas en todo este tiempo?.

Siempre estarás en mi corazón, estoy orgulloso de ti. Y aunque sé que nos vamos a seguir viendo, no será igual...

Un abrazo enorme, Quique, mi compañero, EL compañero.