29 de junio de 2009

El día del orgullo hetero

Cuando llega el día del orgullo gay (que fue ayer, 28 de junio), muchos de mis amigos heteros (incluso gays) se sienten muy desvinculados de dicha celebración. Dicen que ya que hay un día para el orgullo homosexual, también debería haberlo para el heterosexual, y siempre aluden a la fantochada del desfile-manifestación del orgullo gay.

Pues yo no estoy ni remotamente de acuerdo. En nada, de hecho. Durante los últimos años me he abierto muchísimo de mente y ahora tengo una visión muy distinta de la celebración del orgullo homosexual; en este mismo blog, no hace tanto tiempo, decía que no me identificaba con el arquetipo de gay musculado con trajes de lycra y marcando paquete mientras se sube a una carroza con musiquita tecno acompañando mientras coristas transexuales adoran su cuerpo de gimnasio. Evidentemente, sigo sin identificarme; pero no lo condeno, ni pienso que estén empañando la imagen de los homosexuales normales, si es que ese concepto existe. No existe lo normal ni lo diferente, tan solo diferentes formas de entender la vida y, mientras no se haga daño a nadie, no es reprochable ni condenable.

Si lo pienso, mi propia intolerancia respecto a ese grupo de gays con el que no me idenfifico es exactamente el mismo tipo de marginación que el que imponen las familias ultracatólicas, del opus dei o simplemente la gente homófoba: se nos ve como una amenaza a su forma de vida, a su forma correcta de pasar por este mundo y ser ciudadanos respetables y respetados. Cuando fui consciente de esa perspectiva, fue cuando me dije a mí mismo que no iba a ser de juicio tan ligero. Y aunque a veces, ciertas cosas que veo en el ambiente siguen dándome grima, ya no lo asocio al mundo gay, simplemente a actitudes independientes de ciertos grupos de personas.

Pero a mí me gustaría decirles algo a todas las personas que creen que el orgullo gay es algo que a estas alturas ya no debería celebrarse: que se equivocan de pleno. Tengo mil millones de razones para que se celebre un orgullo gay y no un hetero. A los heteros no se les mata por ser heterosexuales. Ni se les pega. Ni se les insulta. Ni se tienen dobles morales con ellos. Ni provoca trastornos psicológicos en los jóvenes. Ni se les señala con el dedo. Ni son objeto de las iras de las asociaciones ultraconservadoras. Ni se les trata como enfermos, viciosos o degenerados. Eso, a día de hoy, y aunque se haya avanzado mucho, sigue pasando. El maricón sigue siendo un maricón para quien no abre los ojos.

El lema de este año es Stop homofobia en las escuelas. El año pasado fue Por la visibilidad lésbica. Creemos que porque en España sea legal casarse entre homosexuales, un logro de proporciones mastodónticas que me hace sentirme realmente orgulloso de ser español (de otras cosas no tanto), ya está hecho todo. Falso. Las mujeres lesbianas tienen doble discriminación: la misógina y la homófoba. Por eso siempre hay tanto maricón y tan poca bollera a la vista. A los niños con pluma o amanerados se les siguen haciendo atrocidades físicas y psicológicas en las escuelas sin que nadie haga nada por evitarlo, o pocos. Los transexuales aún son visto como aberraciones de la naturaleza. Todo esto ocurre en mayor o menor medida y hay que seguir luchando porque la balanza se desequilibre aún más hacia el lado positivo, el de la tolerancia, el respeto, la comprensión, la explicación y la educación. Las garrulerías deberían quedarse en el pasado.

Yo no me siento identificado con mucho de lo que se ve en el show del orgullo gay, pero tampoco lo veo como mi enemigo. Sí que me disgusta ver cómo cada año se multiplica más el marketing y se reduce la parte reivindicativa, al contrario de lo que vi en Amsterdam, mucho más comedido y equilibrado. Lo que yo veo cuando estoy en medio de la manifestación, con mi camiseta colorida y florida, mi carácter homosexual en plena explosión de gozo, la música, el sol y la alegría uniendo a miles de personas es una celebración preciosa, sincera, alegre, de la vida y la libertad, al derecho de ser tú mismo sin importar cuan extravagante parezca. Esa es la esencia del orgullo gay, y por eso debe seguir celebrándose una vez al año aunque haya luego que trabajar en el día a día para erradicar uno de los peores cánceres que hay en este país: la homofobia, seriamente mermada pero aún latente.

Todo esto, evidentemente, con el máximo respeto a todo el colectivo heterosexual.

Nos vemos esta semana en Chueca. Nos vemos el sábado en Madrid.

Un abrazo.


9 comentarios:

Uzu dijo...

orgullo.

1. m. Arrogancia, vanidad, exceso de estimación propia, que a veces es disimulable por nacer de causas nobles y virtuosas.


Comprenderás que no se tome muy en cuenta la justificación de "a los heteros no se les mata, insulta etc" para manifestar orgullo.

Que me parece estupendo que la gente se sienta orgullosa de lo que quiera que se sienta orgullosa, pero a cada cosa, por su nombre.

Y ojalá el peor problema de la sociedad fuese la homofobia...

Unknown dijo...

A mi me parece estupendo tirar de diccionario para este tipo de cosas, la verdad. A veces vemos que nos conviene bastante. Pues dirás lo que quieras, pero a un hetero no se le mata por ser hetero, y eso es así. Y sí que me siento orgulloso (=vanidoso excesivo, según el diccionario) por los avances que se han hecho estos años al respecto. Se ha evitado mucho, mucho dolor a muchas personas. Y por cierto, si en tu orgullo (=vanidad) te has sentido herido con mi comentario, te pido disculpas con toda sinceridad y sin un solo atisbo de ironía ni sarcasmo. No era mi intención.

Uzu dijo...

Tranquilo, ni me he ofendido ni herido ni nada de nada.
Ni niego que a un heterosexual no se le mate por ser heterosexual, como tampoco niego que a un homosexual se le mate por ser homosexual. No lo he dicho, y tampoco lo digo ahora, namás faltaria .-p

Simplemente, matizar las palabras, por que no es lo mismo estar orgulloso que estar feliz y contento y alegre y no avergonzarse, por ejemplo.

No sé si me explico xD

Unknown dijo...

Sí sí, ahora creo que te he entendido perfectamente. La verdad es que la palabra "Orgullo" es un poco exagerada, sin duda, pero creo que pretende simplemente exaltar en exceso un dogma... pero vamos, que estoy de acuerdo contigo. No es lo mismo estar feliz que estar orgulloso :)

caotico_jq dijo...

Cojonudamente expuesto y defendido. Enhorabuena por el texto.

El Oso Sin Madroño dijo...

El término escogido («orgullo»), tiene probablemente más sentido, desde un punto de vista filológico, en inglés que en español. En efecto, la idea que parece transmitir este concepto es más bien la de una dignidad intrínseca de cada ser humano, que no debe verse afectada por su conducta ni orientación sexuales. En tal sentido, la traducción más correcta debería ser dignidad gay.

Esto lo encontre en la wikipedia

Te doy totalmente la razon, no estoy en contra de la manifestacion del orgullo sino de la forma en que se esta lloevando a cabo

Un saludo y nos vemos el sabado

Unknown dijo...

caotico_jq, muchas gracias:)

Oso desenmadroñado, es realmente interesante el texto de la Wikipedia. Me lo anoto para futuros textos con tu permiso. Nos vemos el sábado, y muchas gracias por el comentario. En verdad creo que, al menos un poco, el desfile del orgullo tendría que tener algo más de reivindicaicación. En Amsterdam vi tantas asociaciones chulas que lo eché mucho de menos aquí...

peibol dijo...

Yo sí creo que hasta que no se eliminen las injusticias, deberían seguir celebrándose, pero también pienso que no es necesario ese histrionismo exagerado, porque viéndolo por encima, es difícil buscar una buena réplica para quien diga que es una "tremenda mariconada". :s

Saludos ;)

gustavo dijo...

definitivamente coincido con cada una de tus palabras. Es que siempre, bueno de un tiempo para acá, he pensado que no podemso andar quejándonos de discirminación y demás cosas cuando en el mismo "gremio" somos excluyentes, discriminantes y poco tolerantes. Los arquetipos están allí, los estereotipos también. Pero, de nosotros queda la forma en que estos pueden convivir y llegar a la armn¿onia plena.

Gracias por tus modestas reflexiones que nos hacne pensar tanto a todos nosotros.

Saludos
un abrazo