Desde que ya hace bastantes años sacara ese primer disco con 16 añitos,
Aprendiz,
Malú siempre me ha parecido un auténtico
portento a nivel vocal. Ella como persona no es que me diga gran cosa, pero como ya digo, ciñéndonos simplemente a su talento como cantante, debo decir que me apasiona. Máxime cuando escuchas su primer disco y el último y notas lo mucho, pero
MUCHO que ha aprendido esta muchacha en los ya ocho años que lleva en el candelero. Recuerdo que precisamente a finales de 1998 la vi por primera vez en directo en una gala de 40 principales, cuando aún iba de
rubia de bote, en una discoteca de Madrid, y fue la única que cantó en vivo. Me encantó. Curiosamente, ahora que Shakira es una megaestrella internacional, recuerdo cómo esta era casi desconocida aquí y cantó en esa misma gala
Ciega, Sordomuda e
Inevitable en Playback. Qué cosas… desde ese día, son dos los conciertos de Malú a los que he ido y simplemente me ha dejado sin aliento.
Pero bueno, vamos a aquello por lo que escribo, el
último disco de Malú,
Desafío. Su anterior trabajo, que salió hace poco más de un año, titulado igual que ella,
Malú, no me maravilló en absoluto. Salvo
Diles y algún que otro tema, el disco era bastante prescindible, algo que no me había pasado nunca con ella. De hecho, el anterior a este, un disco en vivo con grandes éxitos, me pareció impresionante de cabo a rabo. Y cuando supe del nuevo disco de Malú, pensé
Joer, qué rapidez en sacar un disco nuevo; será para compensar el tropezón del anterior. Pues aún no tengo respuesta a eso, pero sí tengo clara una conclusión tras haberlo digerido ya bastantes veces en un par de semanas: este disco es una
JOYA. Hacía tiempo que un disco en español (con permiso del último de
La quinta estación) me emocionaba tanto, máxime cuando el 80% de lo que escucho es música en inglés.
Me gustaría recomendar abiertamente la escucha e incluso compra de este maravilloso disco, del cual quiero destacar el tema
Agua de mayo, compuesto por Lorca, en primera instancia. Después
Aulili, un tema excelente con una peculiaridad graciosísima que hizo que me partiera en mi coche el otro día: el estribillo de este tema está cantado a dúo con unas niñas canijas de 4 años que le dan un punto pitufo la mar de divertido. Luego, una extravagancia también de factura impresionante llamada
No voy a cambiar, con reminiscencias Mexicanas (coro de Mariachis incluído) pegadizo a más no poder, la emocionante
Dame tu alma y el single comercial pero efectivo de presentación
Si estoy loca.
En definitiva,
acepto el Desafío de Malú. Por muchos años, muchacha. Eres una de las mejores voces de este país.
Un abrazo.